En pleno año 2017, llevamos casi dos décadas escuchando y leyendo las mismas noticias acerca de un tema tan complejo como es el de la piratería de contenidos sujetos a derechos de autor, parece que a lo largo de estos años la misma historia se ha venido repitiendo una y otra vez.
A estas alturas ya hay multitud de grupos y compañías que se han especializado en intentar frenar el consumo de estos contenidos ilícitos de manera gratuita, intentando parar lo que se ya se podría comenzar a denominar como imparable. Por muchas firmas que se dediquen a estas tareas, son muchos más los s, portales de Internet, aplicaciones y servicios de todo tipo que se dedican a fomentar y a hacer uso de estos archivos; millones de s a los que «controlar», lo que resulta casi imposible.
También hay que tener en cuenta que estas tareas de mitigación tienen un elevado coste para los grupos antipiratería en la mayoría de los casos, y luego hay que reconocer que los resultados normalmente no son ni mucho menos los esperados. Hasta la fecha hay varios sistemas que son los más extendidos para que los internautas puedan acceder a ficheros con copyright, sean del tipo que sean. Están las extendidas redes P2P, la descarga directa de estos ficheros y el streaming. Además, no solo hablamos de películas y series, que quizá a día de hoy sean los contenidos más demandados por los piratas, sino que también se realizan estas tareas con música, libros, programas informáticos, juegos, etc.
De hecho este equipo antipiratería es una de las muchas empresas que intentan convertir la lucha contra la piratería en Internet en ganancias, algo que pesar de los esfuerzos y el paso del tiempo, resulta demasiado complicado. Básicamente lo que esta firma lleva a cabo son las llamadas operaciones de control de derechos de autor, ya que monitorea a los presuntos delincuentes en redes BitTorrent y rastrea a sus ISPs para luego intentar extraer un pago en efectivo, pero los resultados positivos son mínimos. Todo ello a pesar de resolver cientos de miles de casos contra s independientes, ya que ha quedado demostrado que el beneficio de todo ello no es suficiente para mantener el grupo a flote, principalmente debido a los millones de dólares en pérdidas que tienen.
Y este es tan solo un caso de los muchos que existen de este tipo, lo que no es una buena noticia, ni para este tipo de compañías, ni para los propietarios de los derechos de autor, más si tenemos en cuenta que los piratas de Internet siguen avanzando con nuevos sistemas para acceder a todo tipo de contenidos ilegítimos. Del mismo modo cada día salen a la luz nuevas aplicaciones y servicios que permiten a los s habituales de este tipo de contenidos, saltarse los bloqueos y pasar por encima de las medidas que este tipo de empresas proponen para acabar con la piratería.