Windows 7 ha muerto hoy. La aciaga fecha del 14 de enero de 2020 era la que Microsoft había establecido como el último día en el que Windows 7 iba a recibir actualizaciones de seguridad. A partir de ahora, usar el sistema operativo es inseguro. Por ello, vamos a recopilar las posibles alternativas a Windows, entre las que se incluye poder seguir usando Windows 7 de forma segura.
Windows 7 todavía tiene una alta cuota de mercado
El fin de soporte oficial no implica que en el futuro no puedan llegar actualizaciones críticas, como pasó con WannaCry con Windows XP, cuyo parche llegó varios años después de que XP dejase de tener soporte. Sin embargo, esto serán meras excepciones, y las decenas de vulnerabilidades que se parchean cada mes no serán solucionadas.

Los programas compatibles con Windows 7, por suerte, sí seguirán recibiendo parches y soluciones a vulnerabilidades, como es el caso de Chrome, Steam, Firefox o el propio Microsoft Edge. Google ha confirmado que seguirá dando soporte durante al menos 18 meses, aunque a partir de ahí no garantizan nada, y navegar con Chrome puede implicar graves problemas.
Según NetMarketShare, Windows 7 sigue teniendo una alta cuota de uso. Desde principios de 2019, la cuota de mercado de Windows 7 se ha desplomado hasta estar en el 26,64% del mercado en diciembre de 2019, frente al 54,62% de Windows 10. Windows 8.1 se sitúa en un 3,63%. El fin del soporte oficial va a hacer que haya más ventas de nuevos ordenadores, a pesar de que actualizar sea gratis.
Opción 1: actualizar a Windows 8.1 o a Windows 10
Así, tienes la opción de actualizar de una vez por todas a Windows 10, cuyo soporte de actualizaciones de momento parece ser indefinido. Si quieres seguir evitándolo, puedes actualizar a Windows 8.1, que tiene soporte oficial de actualizaciones de seguridad hasta el 10 de enero de 2023. El problema de Windows 8.1 es que vas a necesitar adquirir una clave nueva, ya que no se puede actualizar gratis desde Windows 7 a 8.1, aunque sí se pueda de 7 a 10.
A unas malas, cambiar de PC también puede ser una buena idea si el tuyo es muy antiguo, ya que además los nuevos tienen nuevas licencias incluidas, las cuales valen más de 100 euros si las compras originales. También está la opción de comprar claves por Internet por menos de 10 euros, aunque éstas pueden dejar de ser válidas en cualquier momento.
Opción 2: quedarte en Windows 7
Windows 7 va a seguir funcionando “bien”. El 99% de los programas que funcionan bien en Windows 7, lo hacen también en Windows 10. Si te da igual dejar de disfrutar de lo que ofrece Windows 10, puedes quedarte con tu versión actual. Si no vas a introducir nuevos programas, si no vas a conectar unidades de almacenamiento o no vas a conectarlo a Internet, no estarás expuesto a nuevas vulnerabilidades.
Si aún así vas a conectarlo a Internet, hay una empresa llamada 0Patch que va a seguir lanzando actualizaciones de seguridad de manera no oficial en Windows 7. La mayoría de ellas no serán gratis, y también es probable que no parcheen todas las vulnerabilidades que haya por falta de recursos, por lo que es una opción poco recomendable.
Opción 3: Pagar a Microsoft por recibir las actualizaciones si eres empresa
Mientras un particular puede actualizar tranquilamente su ordenador, las empresas tienen que actualizar decenas o cientos, los cuales además pueden presentar problemas de compatibilidad con algunos programas en versiones de Windows más recientes. Por ello, a algunas les saldrá más rentable de momento seguir pagando al menos un año de actualizaciones.

Microsoft sacará así un ingreso adicional de estas empresas, con un servicio que se extenderá durante tres años, y donde el coste de recibir las actualizaciones se duplicará cada año. El primer año el coste será de 50 dólares por ordenador, pasando a 100 y luego a 200 en el segundo y tercer año.
En diciembre, hubo s que afirmaban haber descubierto un método para saltarse el programa de detección de Microsoft que determinaba si usábamos una versión compatible con las actualizaciones de pago. Este método cambiaba el tipo de versión que tenemos a ojos de Microsoft, pero no se sabe si permite actualizar Windows 7 con las actualizaciones de pago. El método está explicado en los foros de My Digital Life.
Opción 4: cambiar a Linux
Si estás harto de Microsoft, una posible alternativa que tienes a tu alcance es pasarte a Linux. Los sistemas operativos basados en Linux son más complicados de usar y hay un menor número de programas disponibles, pero para un uso normal de consumir contenido y ofimática estás totalmente cubierto. Entre los mejores sistemas operativos de Linux tenemos Ubuntu o Linux Mint. Si buscas una estética parecida a la que ofrece macOS, tienes Elementary OS como opción.
De todas estas, nuestra recomendación es que actualicéis a Windows 10, no sólo por las mejoras de seguridad, sino por las funcionalidades y compatibilidad con los programas más recientes. La telemetría y otros datos estadísticos que Microsoft recopila se pueden bloquear con programas, teniendo a efectos prácticos un Windows 10 seguro sin funcionalidades espía.