La Dark Web sirve en la actualidad para comprar y vender todo tipo de artículos ilegales. Entre los más populares están las tarjetas de crédito robadas, datos personales robados, cuentas de redes sociales, falsificaciones, droga, armas, y un largo etcétera. Los precios han cambiado, y vamos a ver lo que cuestan algunas cosas en la Dark Web en 2021.
El portal Privacy Affairs elabora cada año un listado en el que analizan los precios de la Dark Web a través de las ventas que hay en los diferentes marketplace. Estos portales suelen tener una vida corta de, a lo sumo, unos pocos años antes de que sean cerrados por las autoridades o por los propios creadores.
Tarjetas de crédito y datos bancarios: lo más rentable
Vender datos robados como es el caso de las tarjetas de crédito es una forma fácil de rentabilizar los datos que tienen los hackers. Con ello, evitan que las autoridades les persigan si los usan para llevar a cabo transacciones, pasándole el «marrón» a otro hacker. La finalidad de los hackeos suele ser, en la mayoría de casos, obtener dinero, de ahí que las tarjetas de crédito sean uno de los elementos más robados.
Una tarjeta Mastercard o VISA clonada con todos los datos y el PIN se vende, de media por sólo 25 dólares. Las American Express se venden por algo más, unos 35 dólares. Esas cuentas no están verificadas, por lo que podrían no funcionar o no tener fondos. Por ello, los hackers venden también datos de tarjetas de crédito que sí conocen que cuentan con crédito. Si tienen un balance de al menos 1.000 dólares, se venden por 150 dólares. Si tienen más de 5.000 dólares, se venden por 240 dólares.
gestor de contraseñas como el de Google es ideal, ya que al registrarnos en un sitio nos sugiere incluso contraseñas aleatorias y seguras.