Starlink se ha convertido en una amenaza para los operadores tradicionales. Mientras que en los grandes núcleos urbanos hay fibra óptica, 4G e incluso 5G con velocidades más que de sobra para navegar, en zonas aisladas esto no es así, y muchos de ellos sufren incluso de condiciones monopolísticas. Starlink, sin embargo, va a hacer saltar todo por los aires, y ya son varios los que le temen.
Así están alertándolo ya varios lobbies en favor de pequeños operadores a la FCC en Estados Unidos, que quieren que investiguen si SpaceX puede cumplir lo prometido en velocidad y cobertura, y que piden que se bloquee el de la empresa a ayudas del gobierno.
El pasado mes de diciembre, la FCC celebró la Rural Digital Opportunity Fund (RDOF), en la cual ofrecían 9.200 millones de dólares de financiación a los operadores para llevar Internet de alta velocidad a 5,2 millones de hogares en zonas rurales o aisladas. SpaceX se llevó 885,51 millones de dólares para ofrecer cobertura a 642.925 hogares en 35 estados del país en los próximos 10 años.
observar los satélites de Starlink a simple vista.