En Microsoft no están contentos. Los últimos datos que han llegado informan de cómo la situación con Windows 11 se encuentra en un momento crítico. El sistema operativo cada vez sufre más vulnerabilidades y los virus y malware se han convertido en un grave problema.
Solo con estar al tanto de las últimas noticias y problemas que ha sufrido Windows 11, ya nos podemos hacer a la idea de que la plataforma no pasa por su mejor momento. Pero los peores presagios los ha confirmado, en este caso, un informe de BeyondTrust, entidad que ya nos tiene acostumbrados a la publicación de su informe de vulnerabilidades de Microsoft. En el mismo se repasan los datos correspondientes a 2024 y vemos que Windows está en serios problemas.
Récord histórico de vulnerabilidades
A Microsoft seguro que le gustaría batir récords históricos para bien. Pero, en contraposición a esto, lo que ha conseguido ha sido batir el récord de vulnerabilidades. Lo ha hecho en 2024 con un incremento del 11% sobre la cifra que se había colocado en lo más alto hasta el momento: la del año 2022. Mientras ese año se registraron 1.292 vulnerabilidades, en 2024 la cantidad ha aumentado hasta 1.360. Que la cifra vaya en aumento no es, ni mucho menos, una noticia positiva.
Si hablamos del navegador Microsoft Edge, a la empresa de Windows tampoco le gustará descubrir que se ha producido un aumento de vulnerabilidades del 17%. Y lo peor de todo es que la tendencia va al alza y se está convirtiendo en un problema importante, ya que se ha pasado de 0 vulnerabilidades en 2022 a 292 vulnerabilidades en el pasado año. De estas casi 300 vulnerabilidades, nueve de ellas fueron críticas, un factor que no ayudará a que los s aumenten su confianza en el navegador. En su constante intento de alcanzar a Chrome, Microsoft se tendrá que asegurar de que no se producen más problemas de seguridad en su herramienta.
Los responsables del informe mencionan que las organizaciones se tienen que concentrar en mejorar sus sistemas de seguridad y en garantizar la máxima seguridad incluso utilizando Windows o las herramientas de Microsoft. Además, también hacen especial hincapié en cómo aquellos equipos que no están actualizados y parcheados se transforman en el objetivo más fácil para los atacantes. Por su lado, a Microsoft la ponen en preaviso para que tenga cuidado, ya que, con la introducción de nueva tecnología, también abren nuevos frentes en los que pueden sufrir ataques. Y para que nos entendamos, ponen dos ejemplos claros: el uso de la nube y de la inteligencia artificial, quedando todo ello en manos de unos hackers que no dejan de buscar nuevas formas de llevar a cabo sus actividades.